Tus ojos pendientes de los míos
Tu boca formando una sonrisa que... ¡dios!, sabía que me iba a acompañar en mis sueños.
No hacen falta palabras, no quiero mentiras,
no quiero escucharte esa frase tan trillada:
"¿por qué no somos amigos?"
No... no quiero ser amiga tuya si...
si no puedo sentirte, si no puedo tocarte,
si no puedo besar esos labios que roban mis sueños.
Sueños en los que tu lengua entra en mi boca,
tus dientes juegan con mis labios mientras nuestros sonidos,
nuestros gemidos, nuestras manos
nos acompañan en esos sueños.
No... no me hables,
no quiero oír esas fatídicas palabras que me hagan sufrir.
Déjame soñar, déjame ser feliz...